En el mes de enero, todos los pequeños del mundo esperan con ansiedad la llegada de los reyes magos. Melchor, Gaspar, y Baltasar con su cargamento de ilusiones y juguetes.
En las sagradas escrituras, nos mencionan que estos reyes llegaron cargados con oro, incienso y mirra, para el niño que había nacido, el niño Jesús.
Pero pocos saben la verdadera historia, que en realidad eran cuatro los reyes magos que debían llegar a belén pero, ¿Pero qué paso con el cuarto rey mago?.
Su historia se encuentra en algunos textos antiguos, ARTABÁN... junto con Melchor, Gaspar y Baltasar, habían hecho planes para reunirse en Borssipa una ciudad antigua de Mesopotamia desde donde iniciarían el viaje para adorar al Mesías.
El cuarto rey llevaba consigo gran cantidad de piedras preciosas para ofrecérselas a Jesús, paro cuando viajaba hacia el punto de reunión, encontró a un anciano enfermo, cansado y sin dinero Artabán se vio envuelto en un dilema ayudar a este hombre o continuar su camino para reunirse con los otros reyes. De quedarse con el anciano, seguro perdería el tiempo y los otros reyes lo abandonarían siguiendo su camino. Obedeciendo a su noble corazón, decidió ayudar a aquel anciano. Decidido a cumplir su misión, emprendió su camino sin descansar hasta belén, pero cuál fue su sorpresa el niño ya había nacido, y sus padres José y María habían huido rumbo a Egipto, escapando de la matanza que había ordenado Herodes.
Artabán emprendió su viaje siguiendo los pasos del nazareno, pero por donde el pasaba, la gente le pedía ayuda y el, atendiendo siempre a su noble corazón, ayudaba sin detenerse a pensar que el cargamento de piedras preciosas que cargaba, poco a poco se reducía sin remedio en su andar, Artabán se preguntaba: ¿qué podía hacer si la gente le pedía ayuda? ¿Cómo podría ayudar a quien lo necesitaba?.
Así pasaron los años y en su larga tarea por encontrar a Jesús ayudaba a toda la gente que se lo pedía, treinta y tres años después el viejo y cansado Artabán llego al monte Gólgota para ver la crucifixión de un hombre que decían era el Mesías enviado por Dios para salvar al mundo.
Con un rubí en su bolsa y dispuesto a entregar la joya pese a cualquier cosa, justo en el momento frente a él se apareció una mujer que era llevada a la plaza para venderla como esclava y pagar la deuda de su padre, Artabán entrego la piedra preciosa a cambio de su libertad.
Triste y desconsolado se sentó junto al pórtico de una vieja casa y en ese momento la tierra tembló y una piedra golpeo su cabeza, moribundo y con sus últimas fuerzas, el cuarto rey imploro perdón por no haber cumplido su misión de adorar al Mesías. En ese momento, la voz de Jesús se escucho con fuerza: tuve hambre y me diste de comer, tuve sed y me diste de beber, estuve desnudo y me vestiste, estuve enfermo y me curaste, me hicieron prisionero y me liberaste, Artabán, agotado preguntó ¿Cuándo hice yo esas cosas? Y justo en el momento en que moría, la voz de Jesús le dijo: todo lo que hiciste por los demás lo has hecho por mí, pero hoy estarás conmigo en el reino de los cielos.
No sabemos a ciencia cierta, si esto pudo ser cierto o no, pero lo que si que sabemos, es que esta es una bonita historia cargada de buena fe y amor al prójimo, quizás esta historia no sólo sea una historia, a ti que te parece?.
Artabán el cuarto Rey Mago - Libro en PDF
Mancomunidad
Fuente: archivo PDF
Qué bonita leyenda, no la conocía. Gracias.
ResponderEn respuesta a: .Mari Luz. Me alegra saber que es de tu agrado, un saludo y gracias por comentar.
ResponderQue hermosa historia gracias x darnos la oportunidad d conoserla
ResponderNos alegra saber que te ha gustado.
me gusto la historia que mellena de mucho fe y sentimiento lo contare a mi hijo
!Que bonita y conmovedora historia la de Artaban... Esta podria ser una realidad desconocida para nosotros pero muy cierta en el pasado. Este Rey Mago, vino a ensenarle al mundo, que el amor, el servicio y sacrificio son importantes en la vida del ser humano; sin estas cualidades o virtudes no conoceremos la felicidad y mucho menos a Dios... Gracias a la persona o medio de comunicacion que la subio e hizo posible conocerla!
me parece excelene historis hay uantos cristianso que podías imitar el accionar de Artaban ayudando a nuestros hermanos necesitados
ResponderMe ha encantado llegar aquí y poder conocer esta linda historia
ResponderLa autenticidad da a la persona una natural confianza, pues con el paso del tiempo ha sabido cumplir con los deberes que le son propios, procurando perfeccionar el ejercicio de estas labores superando la apatía y la superficialidad, sin quejas ni lamentaciones. Por la integridad que da el cultivo de este valor, nos convertimos en personas dignas de confianza y honorables, poniendo nuestras cualidades y aptitudes al servicio de los demás, pues nuestras miras van más allá de nuestra persona e intereses.
Responder¡Que bonita y estupenda historia!
Gracias a páginas y artículos como este, una siente que no todos es malo en las personas.
Mis felicitaciones.
Muchas gracias, Dariana, la verdad es que es una historia preciosa, como bien dices. Un saludo y feliz año nuevo de esperanza y amor.